Cuando la ira entra en una persona, difícilmente se la pueden quitar y este hombre, al sentir que llegaba a su límite de paciencia, cometió una locura.
Este empleado de 22 años intentó incendiar el edificio donde estaba su trabajo porque no le renovaron su contrato laboral.
Los hechos ocurrieron en Argentina cuando este hombre tomó un galón de combustible, lo arrojó en el pasillo y aventó un encendedor. El hombre escapó por la ventana pero afortunadamente fue detenido. El hombre no tuvo renovación de contrato porque faltaba mucho al trabajo y no trabajaba muy bien. Además, anteriormente ya había actuado con violencia.
*los40
