La llegada de la primavera supone un aumento de las horas de luz, lo cual produce mayor segregación de vitamina D, esto debido a que la exposición a la luz aumenta la secreción de endorfinas en hombres y mujeres, las cuales alivian el estrés, levantan el ánimo y estimulan la respuesta sexual del cuerpo.
De acuerdo a la Asociación Estatal de los Profesionales de la Sexología de Madrid (AEPS), las consultas sexológicas suelen aumentar a partir de la entrada oficial de la primavera que este año entró el 20 de marzo.
Además, la Universidad Médica de Graz en Austria realizó un estudio con 2 mil 299 personas el cual reveló que aquellos que tienen altas cantidades de vitamina D presentan un mayor nivel de testosterona en la sangre y consecuentemente experimentan un incremento en la libido y el apetito sexual.
Debido a esto, aumenta la producción de feromonas y melatonina que son las hormonas determinantes de la actividad sexual.
El Instituto de Psicoterapia y Educación Sexual de Monterrey (Inprosex) señala que 8 de cada 10 personas manifiestan incremento en el apetito sexual en primavera.
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