Los collares de ámbar ayudan con las molestias de la dentición de los bebés, pero deben ser de ámbar báltico que contiene entre 3% y 8% de ácido succínico al que se le atribuyen efectos analgésicos y desinflamatorios. Aunque no está comprobado científicamente, sí se sabe que no es tóxico para el bebé. Al calentarse el collar con la temperatura corporal de tu bebé se liberará el ácido succínico y con él los efectos para las molestias de la dentición.
En el mercado puedes encontrar collares de ámbar báltico falsos, una forma de comprobar que es real es colocarlo a una fuente de calor directa, como la flama de una vela y si al calentarse expide un aroma como resina de pino es original; si huele a quemado es un ámbar falso.
Debes buscar un collar de cuentas pequeñas que tengan un pequeño nudo entre cada una; en caso de romperse sólo se liberará una cuenta. Las cuentas del collar deben ser completamente redondas y lisas para que no lastimen la piel de tu bebé.
El collar no debe quedarle muy largo al bebé, pues así evitarás que lo muerda y pueda romperlo y por supuesto se enrede con mayor facilidad en él. Coloca el collar de ámbar báltico directamente sobre la piel de tu bebé, en caso contrario, no se calentará lo suficiente para liberar el ácido succínico.
Pero lo más importante de todo: el collar lo debe usar tu bebé solo bajo estricta vigilancia de un adulto para evitar riesgos por ahogamiento al tragarse una cuenta o por asfixia al enredarse con él.
VÍA*ESPECTACULOSTELEVISA