El paisa viajó a Bolivia para brindar un concierto pero fue interrogado por las autoridades por una presunta estafa ocurrida en el año 2014, en la cual tenía una presentación programada, que nunca realizó y por el que habían pagado una cifra cercana a los 60 mil dólares unos 180 millones de pesos.
Al cantante lo dejaron salir de Bolivia solo porque prometió que pagaría la deuda para que el proceso no llegue a los estrados judiciales, y de no ser así ordenarán a la Fiscalía su captura internacional.
Por su parte el papá del cantante, Álvaro Osorio también dejó en duda el pago. Él era el mánager del cantante para ese entonces pero le aseguró a Caracol que, primero, no fueron 60 mil dólares, sino que el adelanto fue mucho menor; y segundo, que el incumplimiento fue de los que contrataron a Balvin.
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