El vuelo 994 de Southwest Airlines que iba desde Louisville, Kentucky a Baltimore, Maryland, debió ser evacuado este miércoles por la explosión de un teléfono Samsung Galaxy Note 7, cuando los pasajeros acababan de embarcar el avión.
El dispositivo había sido reemplazado en septiembre por la compañía a raíz de otros inconvenientes con las baterías del modelo.
“Un cliente nos informó de que salía humo de un dispositivo electrónico y todos los pasajeros y la tripulación fueron desalojados a través de la puerta principal de la cabina”, le contó a la BBC un vocero de la aerolínea.
Brian Green, dueño del smartphone, informó que comenzó a notar que el aparato había empezado a recalentarse dentro de su bolsillo. Lo arrojó al suelo, y notó que emitía un “espeso humo de color gris-verdoso”, según le dijo al portal de noticias tecnológicas The Verge.
Los riesgos de explosion fueron de tal magnitud que la Agencia Federal de Aviación de Estados Unidos emitió un comunicado recomendando no cargar el aparato durante los vuelos.
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