Rob Collington, fundador de Gastronaut Ice Cream, siempre fue un gran fan del helado Astronaut, un helado liofilizado, que se vende en museos espaciales y tiendas de camping en EE.UU. El empresario de 34 años ha disfrutado de ese helado desde que era pequeño, a pesar de que admite que no es muy bueno, porque está hecho con el helado más barato disponible, y contiene ingredientes artificiales. Pero tiene una gran ventaja sobre incluso el más delicioso helado tradicional: no se derrite, no importa cuánto caliente el sol.
Después de reunir todos los conocimientos técnicos necesarios, Rob creó Gastronaut Ice Cream, una versión premium del helado Astronaut, elaborado mediante liofilización de “helado orgánico super-premium”. El proceso de liofilización implica en primer lugar congelar una sustancia alimenticia, a continuación, la creación de un potente vacío, y la adición de calor que extrae el líquido congelado en forma de vapor.
A diferencia del helado regular, Gastronaut se almacena a temperatura ambiente, pero una vez que le das un bocado, absorbe la humedad en la boca y se convierte en “exactamente el mismo helado dulce y cremoso que conociste toda su vida, ¡pero sin que se te congele el cerebro!”.
*PERIODISMO