El rapero rompe el silencio y asegura que Dios quería que él hablara de esa manera durante los premios MTV VMA de hace 11 años durante la premiación de la cantante pop.
Los MTV VMA de 2009 marcaron el comienzo de uno de los enfrentamientos que más ha dado que hablar en la industria discográfica: el que aún mantienen Taylor Swift y Kanye West.
En aquella entrega de premios, el rapero interrumpió el discurso de agradecimiento de la entonces jovencísima cantante para asegurar que Beyoncé debería de haberse llevado el galardón que acababan de entregarle a ella.
Desde entonces, los dos músicos han protagonizado una reconciliación que no duró demasiado y varios cruces de acusaciones, pero a día de hoy Kanye ha llegado a la conclusión de que actuó de forma correcta al hablar desde el corazón. De hecho, está convencido de que en realidad él solo fue un instrumento divino.
«Si Dios no hubiera querido que subiera al escenario y dijese que Beyoncé tenía el mejor videoclip del año, no me habría sentado en primera fila. Habría estado al fondo del todo. No hubiera hecho que esa idea (que Taylor ganara el premio al mejor vídeo del año) resultase tan ridícula, porque yo nunca había oído hablar de ella y el ‘Single Ladies’ de Beyoncé sigue siendo uno de los mejores videoclips de la historia», ha afirmado el marido de Kim Kardashian en una entrevista al podcast de Nick Cannon para exponer su razonamiento.
Tras su renacer espiritual, que comenzó cuando ingresó en un hospital en 2016 por estrés y falta de sueño y le dio por leer la biblia, Kanye siente que Dios le «proporciona información» a diario para que se dedique a hacer su voluntad.
«Él tiene un plan para cada uno de nosotros y nos utiliza de maneras diferentes», ha concluido.