A pesar de su carisma en el escenario, Freddie Mercury siempre fue una figura envuelta en un halo de misterio.
Uno de los grandes misterios en torno al que fuera vocalista de Queen tiene que ver con el lugar donde se esparcieron sus cenizas tras su muerte. Por que Freddie (nacido como Farrokh Bulsara en Zanzíbar en 1946) no tiene una tumba o una lápida donde sus millones de admiradores puedan acudir para presentarle sus respetos.
El misterio en realidad parece no ser tal, pues todo parece indicar que las cenizas se esparcieron en el lago Ginebra, muy cerca de la casa que el músico tenía en aquella zona, a unos kilómetros de Montreaux (Suiza). Un lugar al que tanto él como los otros miembros de Queen acudían en busca de paz y desconexión, así como para trabajar en su música.
Allá por 2010, el asistente personal de Freddie Mercury, Peter Freestone, aseguró que las cenizas se lanzaron al lago Ginebra, pero tampoco es algo que esté oficialmente confirmado al cien por cien. Esta versión se contradice con la de algunos familiares del cantante, que afirmaban que éste está enterrado en Zanzíbar.
También se dice que reposan a los pies del enorme roble que corona el jardín de su residencia Garden Lodge (Londres), e incluso hay quien sostiene que se repartieron entre varios teatros londinenses. Sin embargo, ninguna de estas afirmaciones ha podido confirmarse hasta ahora.
*DAILYTREND