Su nombre es Ivy Angerman, vive en Minnesota, tiene 18 meses y es alérgica al agua. Cada vez que se baña, llora, suda o toca el agua, aparecen erupciones rojizas en su piel, dejando un dolor muy parecido a las quemaduras de tercer grado.
De acuerdo con la revista People, los especialistas del Centro de Información de Enfermedades Raras y Genéticas, en Estados Unidos, le diagnosticaron urticaria acuagénica, una rara enfermedad que se desarrolla después de que la piel entre en contacto con el agua, independientemente de su temperatura.
Los padres de Ivy relatan al medio antes mencionado, que un baño de 15 segundos puede provocar erupciones y dolor insoportable en la pequeña por los siguientes 15 o 60 minutos. Aunque la menor recibía un tratamiento de antihistamínicos dos veces al día para aminorar los síntomas, su cuerpo comenzó a ser inmune al medicamento, razón por la que sus padres decidieron bañarla dos veces a la semana, intentando que el tiempo que pase bajo el agua sea menos.
“Ivy amaba el baño. Ahora grita como si estuviera siendo asesinada”, explica Brittany, mamá de la pequeña.
La alergia de Ivy hizo que Brittany creara una petición en GoFundMe, una página con la que busca recaudar fondos para que su familia pueda mudarse a una casa con un sistema de agua purificada y aire central que ayudarían a minimizar los dolores de su hija.
*LASESTRELLAS