Los niños de Illfurt, Alemania
Los pobladores de Illfurt aseguran que a mediados del siglo XIX dos hermanos de 8 y 9 años estaban poseídos por el demonio. Los niños hablaban lenguas extrañas, sus cuerpos parecían mutar, se hinchaban y su estómago se movía, además de hablar con voz gruesa y sin mover los labios. Su habitación parecía un horno caliente en pleno invierno y sin siquiera encender la calefacción, tenían gran fuerza, era necesaria la intervención de varios hombres para contener el ímpetu de los niños.
Después de tres años, la Iglesia católica aprobó los exorcismos, mientras ocurría esto, los niños se calmaron y se sumieron en un profundo sueño. A la mañana siguiente, ambos despertaron completamente sanos y sin ningún daño en su cuerpo.
*Taringa