Escuchar música es uno de los placeres más grandes de este mundo. Esa sensación de darle play a tus canciones favoritas para agitar o aliviar tu estado de ánimo es única.
Y es que el ritmo no sólo puede calmar las emociones, también aclara los pensamientos. Sus sonidos no sólo afectan la manera en que te comportas, también coordina lo que piensas. Emociones y movimientos se ligan a la música cuando la escuchas. Si no eres tan buen bailarín una canción con buen ritmo podrías salvarte. No es una locura, en realidad ocurre. Coordina mejor tus pasos y también tus ideas si es que estás en una cita.
Y cuando te imaginas bailando, la percepción que tengas de ti será mucho mejor. La manera de ver el mundo también cambia con canciones que tienen buena armonía sonora. Todo aquello que entra a la mente a través de nuestros ojos, se ve afectado por las melodías que escuchamos.
¿Qué es lo que sucede? Tus ondas cerebrales se sincronizan con el ritmo de acuerdo con una investigación de la Universidad de Singapur. Esto facilita nuestras relaciones interpersonales, no sólo cómo nos movemos, sino cómo pensamos y hablamos.
*KEBUENAMX