Así se desprende de un reciente estudio de la Universidad Northumbria (Reino Unido) que indica que los “fumadores sociales”, es decir, que solo fuman una media de 20 cigarrillos durante los fines de semana, normalmente en compañía de amigos y familiares, sufren daños en su memoria idénticos a quienes consumen tabaco a diario.
A través de una serie de experimentos, los investigadores demostraron que, tanto quienes fumaban siete días a la semana como quienes lo hacían solo dos de cada siete días, obtenían peores resultados en las pruebas de memoria prospectiva -que nos permite recordar acciones programadas-que los no fumadores. Tom Heffernan, coautor de la investigación que publica la revista Open Addiction, asegura que el deterioro de la memoria vinculado al tabaco se puede achacar a un declive cerebral acelerado y a que fumar encoge el cerebro.
FUENTE: http://www.sabiasundato.com/