Una mujer se armó de valor y, sabiendo que su amante estaba por dar el sí ante el juez (nomás que con otra mujer), no dudó en presentarse y gritar el clásico: “¡fuiste mío!”
¿Qué, creyeron que iba a ser una onda telenovela mexicana y que la susodicha iba a llegar llorando y suplicando por el amor del hombre que la cambió por otra? Ni maíz. Para hacerle más gruesa la bronca, la mujer se atavió con un vestido de novia y a grito pelón llamó “mujeriego” al hombre de negro (lo decimos por el color de su elegante traje, no por el de su piel… lo cual no tendría nada de malo).
Los hechos sucedieron en un registro civil de Ghana… y ya que nuestro ghanés está un poco deficiente, lo que alcanzamos a entender es que el cábula de peinado extravagante y la mujer engañada se armaron un diálogo de antología, lleno de albures y chistes picantes, ya que los asistentes no dejan de gritar y soltar la carcajada ante la jocosa escena. Todo ante los ojos de la feliz pareja que no movió ni un dedo y dejó que el juez siguiera con el show.
*SOPITAS