Todos hemos sufrido algún tipo de dolor de cabeza, ya sea después de una jornada intensa de trabajo, por pasar varias horas frente al monitor de la computadora o de forma “espontánea”. Este tipo de malestares son tan comunes que casi nunca les atribuimos alguna gravedad, sin embargo pueden tenerla dependiendo del lugar y tipo de dolor que sintamos, ya que estos indican su relación con algunas enfermedades. Entre ellas:
Migraña
El malestar se inicia en el ojo o a su alrededor, así como en la sien. Se sienten pulsaciones, náuseas y vómitos y generalmente el dolor es más fuerte en un lado de la cabeza que en el otro.
Tensión muscular
Son dolores intermitentes y pueden compararse con una sensación de tirantez en la parte posterior de la cabeza. Comúnmente se le describe como una sensación de dolor en forma de “banda” alrededor del cráneo y que tiene un recorrido descendente desde la parte superior hasta la nuca.
Iritis o glaucoma
Surge en la frente o en los ojos, es un dolor intenso acompañado de sutiles trastornos visuales como ver halos alrededor de la luz eléctrica o tener dificultad para adaptarse a la oscuridad.
Problemas de los senos paranasales
Es un dolor agudo que empeora con el clima frío y húmedo. Generalmente va acompañado de dolor detrás de los ojos, en las muelas o sensibilidad en el rostro.
Tumor cerebral
Si usualmente no tienes dolores de cabeza o de pronto experimentas un tipo de dolor distinto a lo habitual, podría ser una señal de alarma. La mayoría de las veces, los dolores provocados por algún tumor van acompañados de náuseas, mareos o vómitos. Las señales más obvias son convulsiones, dificultad para hablar, debilidad en el cuerpo o problemas con la visión periférica.
Absceso cerebral
Es un dolor punzante que va de leve a intenso y surge por una infección de oídos. Los abscesos cerebrales comúnmente ocurren cuando las bacterias u hongos infectan parte del cerebro y se presenta hinchazón e irritación (inflamación) en respuesta a esta infección. Usualmente vienen acompañados de dificultades para hablar, pérdida de coordinación motora o funciones musculares, crisis epiléptica, vómitos, problemas de visión y rigidez en el cuello.
*Terra