Ya no soportas las multitudes
Antes la idea de ir a meterte hasta adelante a los conciertos, armar un slam y salir de ahí vivo y triunfante era la mejor idea de diversión, pero ahora ya te pesa. Si te aventuras a llegar hasta adelante es porque el artista que se presenta te gusta en verdad, de lo contrario buscarás la manera de encontrar un lugar en donde puedas apreciar el show sin tanto empujón.
Las fiestas ya no son lo mismo
En la adolescencia la idea de echar fiesta era reunirte en la casa de tus amigos y tomar hasta el amanecer o caerle a la fiesta más cercana y tomar sin control hasta el otro día, pero ahora disfrutas más de un bar tranquilo y una buena conversación con tus amigos.
Esto no quiere decir que las fiestas alocadas se acabaron en la vida, pero sabes las consecuencias que una noche de fiesta puede traer a tu cuerpo.
La cruda cada vez es peor
Es justo a esto a lo que nos referimos como “consecuencias de una noche de fiesta” y es que no podemos negar que antes con un poco de agua y un par de aspirinas estábamos listos para lo que fuera, pero ahora nos cuesta más trabajo deshacernos de los molestos síntomas de la resaca, el dolor de cabeza te dura medio día y prefieres quedarte en casa para recuperarte.