En el Hospital Infantil Starship de Auckland en Nueva Zelanda, un tatuador regala sonrisas a los niños con su oficio.
Benjamin Lloyd realiza tatuajes temporales a los pequeños que luchan contra el cáncer, en cada diseño Benjamin se tarda 9 minutos. La idea del tatuador de realizarle a los niños hermosos tatuajes, es aprobada por los médicos del hospital.
Por su parte algunos usuarios de Facebook han atacado a Benjamin por hacerle tatuajes a los pequeños, ya que no les parece que la piel de los niños esté tatuada porque parecen vagos.
A Benjamin este tipo de comentarios no le importan, porque él sabe que a los pequeños les gusta y el objetivo de esto es que lo niños pasen un momento agradable y se olviden de su enfermedad.