Si en la chamba ya te ven feo porque siempre te da mal del puerco después de la hora de la comida, échale un ojo a este artículo para descubrir todos los beneficios de echarse un coyotito al medio día.
Mejora la memoria. La siesta es un respiro para el cansancio mental. En resonancias magnéticas de personas que toman un descanso de manera frecuente confirman que la actividad cerebral es más alta.
Te despierta. La NASA y la Universidad de Harvard estudiaron la actividad mental de un grupo de pilotos y marineros, y todos ellos estaban más atentos y concentrados después de dormir una pequeña siesta.
Le da un shot a tu creatividad. Según tú te desconectas un ratito, pero mientras pones la cabeza en la almohada hay una explosión de actividad en tu hemisferio derecho, que es el de la creatividad. Y si llegas a la fase REM, mejor, esto ayuda a resolver problemas con mayor facilidad.
Baja el estrés. Vas a estar de mejor humor, y eso tiene que ver con el estado de relajación que alcanzas. Porque si tienes sueño, estás cansado y no haces nada al respecto, estarás como energúmeno.
No lo hagas al ahí se va
- Busca un lugar tranquilo y apaga tu cel.
- Toma una taza de café, porque justo después de los 20 minutos te hará efecto y estarás muy despierto.
- Pon tu alarma y levántate en cuanto suene, nada de 5 minutos más porque así te cargas todos los beneficios.
- Sal a la luz para que el cuerpo entienda que ya se acabó la siesta.
Entre 2 p.m. y 4 p.m. es el mejor momento para la siesta, dicen los expertos
