¿Te cuesta trabajo dormir? Ten cuidado con las cosas que ponemos en esta lista, porque seguro son las razones por las que no estás descansando.
Te lo decimos en serio: no hay nada más importante que descansar bien. Dormir bien y tener un sueño reparador es el verdader secreto de belleza y de salud y no dejes que nadie te diga lo contrario. Y bueno, sonará fácil… ¿pero entonces por qué somos la generación que más sufre de insomnio o de sueño ligero? Hay diversos factores externos y que no dependen de nosotros – como el estrés laboral o la ansiedad que nos provoca ver las noticias– pero hay otros detalles de tu día a día que súper no están aportando nada al problema. ¿Quieres saber cuáles son? Te decimos los factores que podrían estar perjudicando tu buen sueño y descanso.
1. TU TEMPERATURA
Oh sí, aunque no lo creas, este es uno de los primeros factores que puede estar afectando tu sueño. Si vives en una casa donde hace mucho calor o mucho frío, eso hace que tu cuerpo esté buscando regularse y no te concentras en dormir. Así que ajusta la temperatura, ayúdate de un calentador o un ventilador y trata de que el ambiente sea muy cómodo para que sólo debas relajarte.
2. TIENES HAMBRE
Con esto no queremos decir que cenes un bistec de medio kilo… pero si crees que dormirás perfecto con el estómago vacío, ¡te equivocas! Una cena ligera harán maravillas para que puedas descansar como se debe.
3. TIENES SED
Uno de los grandes males de nuestra generación es que no tomamos mucha agua. ¡Incluso tenemos que poner recordatorios en nuestro celular para hacerlo! Casi olvidamos que es algo VITAL. Te recomendamos tener un thermo junto a la cama para que puedas hidratarte (con AGUA, no refresco).
4. EL ESTRÉS DE TODOS LOS DÍAS
¿Te ha pasado que das vueltas y vueltas en la cama pensando en todo lo que te pasó en el día? Te entendemos… pero también debes tener claro que esa manía de repasar todos tus problemas al dormir te afectará más de lo que crees. Siempre habrá problemas, siempre habrá urgencias. Trata de no llevarte eso, más cuando todos los días nos necesitan radiantes y nuevas. Para este caso, te recomendamos escribir un diario y tratar de desahogar ahí todo. Verás que una vez que vacíes toda tu mente en papel, podrás descansar mejor.
5. ALCOHOL
Ups, así es. El alcohol puede que no te esté dando la mejor carta a la hora de dormir. No sólo te deshidrata, sino que el descanso no es lo suficientemente profundo como para que despiertes renovada. Así que no, que duermas rápido después de una fiesta, no significa que descansarás al 100%. ¡Atenta con esto!
6. CAFEÍNA
Sonará un poco obvio, pero te sorprendería saber cuánta gente sabe cómo la cafeína afecta el sueño, y aún así beben café antes de dormir. No decimos que lo evites… pero trata de tomarlo en la mañana y deja que tu cuerpo llegue relajado a la cama.
7. PROBLEMAS DE RESPIRACIÓN
Ya sea un tabique desviado, roncar, nariz tapada… cuando tienes un problema del sistena respiratorio, no hay duda de que jamás tendrás una buena noche de sueño. ¡Ve con un otorrinolaringólogo! De verdad te puede cambiar la vida.
8. UNA VIDA SEDENTARIA
Lo sentimos: si trabajas todos los días sentada, te vas a tu casa en coche, y llegas directamente a sentarte a ver televisión… ¡que no te extrañe que no puedas dormir! Toda esa energía que no has quemado se apodera de ti y jamás lograrás un buen sueño. Te recomendamos hacer ejercicio en casa, irte caminando a todos lados, o si tienes la posibilidad, hacerle un espacio al gimnasio.
9. ESTAR ATENTA A TU CELULAR
Entendemos que a lo largo del día estés atenta a todo lo que pasa en tu celular… pero aunque no lo creas, revisarlo en la noche puede hacerte daño. No sólo no te permite desconectarte del mundo, sino que la luz te afecta muchísimo, ya que hace que tu mente permanezca en estado alerta. ¡Trata dealejarlo! Mejor lee algo antes de dormir.
10. PROBLEMAS PSICOLÓGICOS
¿Crees que a veces la vida te rebasa? ¿No te deja dormir el nos aber cómo lidiar con ciertas situaciones? No estás sola. ¡Y que no te dé miedo pedir ayuda! Recuerda que ir con un profesional en psicología podría ayudarte a obtener las herramientas que necesitas para enfrentar el mundo tan turbulento que estamos viviendo. Invertir en terapia, es invertir en ti.
