Miguel Herrera ha sumado una nueva mancha a su ya polémica trayectoria en el futbol mexicano: a menos de un año de haber abandonado la Selección Mexicana tras una reprobable agresión, arremetió contra Luis García.
Otro de los momentos que recalcaron el comportamiento agresivo de Herrera se dio en un partido contra Honduras en 1993, cuando agredió en dos ocasiones a Dolmo Flores, incluyendo una barrida artera sobre el catracho.
Además, tras la conquista de la Copa de Oro a mediados de 2015, el Piojo hizo uso de la fuerza física para golpear a Christian Martinoli en pleno aeropuerto tras una discusión protagonizada entre ambos a través de Twitter.
El último episodio del mal genio del entrenador se dio de manera reciente, cuando en una entrevista llamó «pend*/»&» en repetidas ocasiones a Luis García, quien hasta ese momento sólo había emitido su opinión sobre la actualidad de la Selección Mexicana.
«¿Ahora se supone que es Dios? Cuando fue deportista fue muy buen futbolista; cuando fue directivo, fue un mal directivo. Ahora como comentarista se cree Dios. ¿Qué se cree para insultar así a la gente? Y no nada más a los futbolistas, a los medios de comunicación, a directivos, a futbolistas. Él y dos güeyes más, cuando no tienen huevos de decir nombres.»
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