Bloomberg se mete de lleno en la economía de nombres, con Marc Hauser, un ejecutivo de la agencia de marketing suiza Erfolgswelle, que empezó creando denominaciones para empresas, y luego pasó a bautizar niños por la cantidad de 29.000 dólares. Este precio incluye alrededor de tres semanas y 100 horas de personas que trabajan para encontrar el nombre perfecto para tu bebé.
Aunque Hauser cree que encontrar un nombre para un bebé debe manejarse estrictamente por los datos, y no por las emociones. Su firma siempre comprueba que un nombre aún no haya sido registrado. “Aun cuando sea parecido a un nombre de marca ya existente, no va a lograrlo”, afirmó. Los historiadores también chequean el nombre para asegurarse de que no tenga “un pasado agravante”.
Para arrancar, Hauser afirma que nunca sería capaz de nombrar a un nuevo bebé con su propio nombre, “Marc”, porque “está conectado con el nombre de un antiguo dios romano de la guerra”.
En Nueva York, Sherri Suzanne dirige My Name for Life y cobra una cifra más razonable, 300 dólares. Sherri afirma que los padres acuden a ella cuando no pueden ponerse de acuerdo sobre un nombre, o necesitan un nombre “norteamericano” que los familiares internacionales puedan pronunciar.
*PERIODISMO