Tras la llegada del bebé debemos considerar un nuevo presupuesto familiar, re-administrar nuestras finanzas y tomar nuevas decisiones financieras. La pregunta es: ¿Cómo lograr hacer rendir los ingresos y controlar los gastos con la llegada del bebé en estos tiempos para que alcance también para el ahorro?
A continuación tres consejos que te pueden servir como una guía en las diferentes etapas financieras de tu nueva familia:
1. Anticípate a la cigüeña, ahorra desde hoy
La buena noticia del embarazo conlleva felicidad, responsabilidad y nuevos gastos. La recomendación en esta etapa inicial es generar en pareja un cambio de conducta en los egresos, sin que esto implique grandes sacrificios, con el fin de maximizar los ingresos y también ahorrar. Trata de liquidar todas tus deudas presentes para no sobre endeudarte y poder hacer frente a los futuros pagos tales como parto, compra de carriola, mobiliario especial para el bebé, y uno de los gastos cotidianos pero onerosos son la compra de pañales, visitas al pediatra, vacunas entre otros. Hacer ajustes de presupuesto el primer mes tal vez sea difícil, pero posteriormente te darás cuenta que podrás cubrir los nuevos rubros de gastos del embarazo sin problema y sintiéndote tranquilo de que no te sobre endeudarás.
2.- Las mamás pueden hacer maravillas con el gasto familiar: invierte la fórmula del ahorro
En materia de finanzas personales no hay una fórmula infalible para el ahorro, lo que le haya funcionado a una persona no implica que te dará a ti el mismo resultado; sin embargo, en esta etapa donde un nuevo miembro llegará a la familia el ahorro es mandatorio, por lo que el mejor consejo para las futuras mamás es “invertir la fórmula del ahorro: Ingreso – Ahorro = Gasto”; es decir, es recomendable descontar al menos un 10% de tu ingreso desde el momento que lo recibes e invertirlo en una herramienta destinada a la planificación del nuevo miembro de la familia. La mitad de ese ahorro podría ser destinado para la llegada del bebé, la otra mitad y el ahorro subsecuente se sugiere destinarlo como ahorro para la educación de tu hijo. Si se invierte la fórmula del ahorro desde el inicio, podrías tener un ahorro para cuando llegue el bebé y podrías crear la disciplina financiera que te permitiría continuar con ese hábito.
3. Comienza a ahorrar para la universidad
Existen diferentes herramientas y mecanismos de ahorro-inversión diseñados exclusivamente para asegurar la educación universitaria de tu hijo, una de las metas financieras más grandes e importantes para la mayoría de los padres. Un buen consejo es asesorarse con el fin de que elijas el producto financiero adecuado para ti en base a tus ingresos, egresos, y los años de ahorro que debes de hacer de acuerdo a cada producto, así como hacer un análisis de si podrás cumplir con esta meta.
Hay que considerar en este camino, que en la etapa de adulto joven además de formar una familia, tal vez quieras comprar un departamento y tener una hipoteca, por lo que el considerar todos los compromisos de gastos en un futuro cercano será una forma de seleccionar el producto en base al monto de ahorro mensual. Pero sin lugar a dudas el ahorro para la Universidad de tu hijo es una muy buena elección, ya que un desembolso mensual para este fin te ahorrará preocupaciones cuando tu hijo sea mayor.
El hacer crecer tu familia es parte de la vida y nos llena de alegría. La disciplina del ahorro es fundamental para poder cumplir con cada meta de la vida y cada etapa del crecimiento de tus hijos.
FUENTE: http://mundoejecutivo.com.mx/