La bulimia y los atracones de comida son dos de los trastornos alimenticios más severos que existen, pues la persona que los padece sufre mucho y vive su compulsión a escondidas, ya sea por vergüenza o culpa.
Los síntomas de ambos son muy parecidos, por lo que puede llegar a ser confuso a la hora de querer diferenciar uno de otro. Te presentamos los síntomas de estos trastornos alimenticios:
1. Comer en exceso. Va a presentarse en los dos casos, pues no existe un control real sobre la comida.
2. Comer a escondidas. La persona siente una gran pena de estar en descontrol, por lo que prefiere asaltar la despensa o el refrigerador cuando nadie la ve, como si estuviera cometiendo un crimen. Después de hacerlo, viene un sentimiento de desolación muy grande.
3. Estar preocupada por peso y figura. ¡Se vuelve una obsesión! Alguien con bulimia o trastorno de atracón vive pensando en si engordó o no y pesándose a cada rato. ¡Es demasiada frustración!
4. Impulsividad. Es el punto en común más grande. A fin de cuenta, los trastornos alimenticios se basan en esta conducta enérgica.
Sin embargo, cada uno tiene síntomas muy particulares. Por ejemplo, una chica con bulimia realiza visitas recurrentes al baño después de comer, ejercicio en exceso y practicar ayunos, entre otros. Es fácil detectar esta enfermedad, pues la persona que la padece no deja pasar más de media hora para ir al baño a devolver la comida.
Por otro lado, el trastorno por atracón puede presentar los siguientes síntomas: Someterse constantemente a dietas, comer alimentos altos en grasas o carbohidratos, rechazo a compromisos sociales que involucren comidas y aislamiento.
*veintitantos.com
