En los ojos
La marihuana hace que los vasos sanguíneos se expandan, por eso es que quienes la fuman, terminan con las pupilas dilatadas y los ojos rojos.
También afecta a ciertas partes del cerebro que procesan lo que vemos, lo que resulta en curiosas alucinaciones que van desde ver movimientos extraños en las paredes, hasta un pedazo de pizza bailando.
En el estómago
Acá es donde entra ese estado al que muchos llaman “el munchies”, que es básicamente el hambre que da a todos los que fuman algo de mota. Según un estudio realizado en ratones, la droga enciende un switch en el cerebro que usualmente se encarga de controlar el apetito.
Otros
Finalmente, también se han encontrado algunos efectos a largo plazo. Por ejemplo, quienes ya fuman marihuana más de tres veces por día, tienen volúmenes más pequeños de materia gris en la corteza orbitofrontal del cerebro.
Otro efecto que se ha registrado en pacientes carcinógenos, es que el uso de esta droga ayuda a mitigar las náuseas en pacientes que se someten a las quimioterapias.
*sopitas